El 1 de octubre la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS) ordenó la retirada del mercado de aquellos fármacos con ranitidina vía oral o en comprimidos debido a la presencia de nitrosaminas en varios lotes. Por lo que quedan exentos de esta orden los medicamentos con ranitidina intravenosa.

Los agentes de la cadena de distribución y dispensación son los que deben devolver las unidades afectadas a los laboratorios, sin interferir en los envases ya dispensados a los pacientes. Precisamente gracias a la rápida implicación de la red de farmacias y a la comunicación entre la AEMPS, el Consejo General de Colegios de Farmacéuticos (CGCOF) y los Colegios Profesionales de Farmacia, la acción de retirada está ejecutándose de forma efectiva.  

 El fin de esta medida es la prevención, pues tal y como señaló la AEMPS en su comunicado “no hay evidencia de que la presencia de esta sustancia haya podido producir daño alguno a los pacientes que han consumido el medicamento”. Aunque sí sea necesario la revisión de estos fármacos para asegurar que la toma acumulativa de los mismos no suponga un peligro futuro.

Bajo esta premisa, resulta primordial que los pacientes consulten el tratamiento con su médico y no tomen decisiones por su cuenta. La interrupción del mismo debe ser marcada por este profesional sanitario, en cuyo caso no supondría problema alguno dado que existen en el mercado otros medicamentos con las mismas indicaciones terapéuticas sin la presencia del principio activo de la ranitidina. En este enlace, puede consultarse el comunicado al completo de la AEMPS y los lotes retirados. Igualmente, el Consejo General de Colegios de Farmacéuticos (CGCOF) ha elaborado esta guía en la que se aclaran las principales dudas al respecto.